La piel quemada por el sol produce efectos negativos inmediatos. El dolor, el escozor y el enrojecimiento son algunos de ellos. Sin embargo, a largo plazo estos empeoran. En este blog siempre se habla de temas de actualidad. Por eso se ha tratado hace poco la cuestión de la viruela del mono. Y por eso, ahora en verano, se hablará de la piel quemada por el sol.
¿Por qué se sufre de piel quemada por el sol?
En todo curso de enfermería familiar y comunitaria se incluye información relacionada con los efectos de los rayos ultravioleta del sol. Son ellos, precisamente, los que ocasionan los efectos típicos de la piel quemada por el sol.
Este proceso nace del hecho de que los rayos UV son una forma de radiación. Al chocar directamente con la piel desprotegida, daña las células e irrita la superficie de la dermis.
¿Cómo daña el sol la piel?
En los cursos OPE de enfermería se enseña que el sol afecta inmediatamente. Sin embargo, al analizar como daña el sol a la piel, se llega a la conclusión de que:
Los efectos del sol en la piel más rápidos surgen en torno a las 2 horas posteriores a comenzar la exposición. Alcanzan su peor momento entre las 12 y las 24 horas después. Son los siguientes:
- Escozor
- Enrojecimiento
- Dolor
- Hinchazón
- Ampollas y síntomas de deshidratación, como mareos y confusión.
Los efectos verdaderamente graves son los que surgen a largo plazo. A diferencia de los anteriores, acaban saliendo después de varios años en los que ha habido piel quemada.
Dado que los segundos tienen mayor entidad, son los que van a exponerse inmediatamente.
Envejecimiento prematuro
Dañar la piel de manera continuada con el sol ocasiona el envejecimiento de la dermis. Múltiples quemaduras a lo largo del tiempo favorecen el surgimiento de manchas y arrugas. Esto da lugar a una sensación estética de falta de juventud. Las arrugas, además, serán más profundas que en ausencia de los efectos dañinos del sol.
Alergia al sol
Término que refiere al sarpullido con picazón que surge tras la luz solar. También llamada polimorfa lumínica, puede desarrollarse como consecuencia de una excesiva exposición. Es decir, pese a que no se tuviese en primer lugar, puede pasar a padecerse como consecuencia de la excesiva exposición.
De esta manera, se acabará reduciendo la capacidad de aguante de la piel a los efectos del sol. En situaciones posteriores, se vivirá una sensación de indefensión solar.
Fotoinmunosupresión
Los rayos UV tienen un efecto muy negativo sobre los glóbulos blancos de la piel. Es decir, la exposición prolongada y continuada al sol puede ocasionar la muerte de múltiples leucocitos. Estas células tienen la función de protección frente a infecciones y enfermedades. Como consecuencia, la piel pasará a estar más expuesta a afecciones como el herpes. A largo plazo, el efecto inmunosupresivo puede ser de alta gravedad.
Cáncer de piel
Este es, sin duda, la consecuencia más dañina que surge de las quemaduras solares a largo plazo. Se ha dicho antes que los rayos UV son una forma de radiación. Como tal, cuentan con efectos mutágenos sobre las células. Fruto de ellos, puede acabar naciendo un tumor sobre la dermis. Este no siempre es mortal y fatal, pero sí supone una enfermedad de gravedad que requiere cirugía.
¿Cuánto tarda en regenerarse la piel quemada por el sol?
Al estudiar un curso EIR se aprende a tratar la piel quemada por el sol. Tras la exposición, los efectos a largo plazo no se pueden controlar, tan solo se puede aconsejar en su prevención. Sin embargo, sí puede hacerse algo con el enrojecimiento, el dolor y el escozor inmediatos.
Así, ante la pregunta de cuanto tarda en regenerarse la piel quemada por el sol pueden darse dos respuestas:
- Cuando se habla de la piel roja y dolorida, esta se recupera en unas 48-72 horas.
- Cuando se habla de la piel pelada por el sol, esta tarda en regenerarse plenamente entre 1 y 3 semanas.
¿Cómo quitar la piel quemada por el sol?
En otros artículos se ha hablado de cómo tratar las quemaduras ocasionadas por el fuego. En este momento es preciso referirse a como quitar la piel quemada por el sol. Básicamente, para los síntomas a corto plazo, existen las siguientes soluciones:
- Tomar analgésicos.
- Refrescar la piel con agua fría.
- Beber agua.
- Aplicar crema hidratante en forma de loción y gel. El aloe vera y la calamina funcionan bien.
- Aplicar una crema con corticosteroides.
- Evitar una nueva exposición al sol.
En conclusión, ya se ha visto cuáles son los principales efectos nocivos de la piel quemada por el sol. Más allá de los inmediatos, como se ha podido comprobar, los verdaderamente graves surgen a largo plazo. En estos casos, por supuesto, más vale prevenir que curar.