Muchas personas no soportan de manera adecuada la tensión que supone enfrentase a un examen OPE. No solo están atemorizadas, sino que se marean o incluso llegan a vomitar. Para evitar llegar tan lejos, es necesario conocer una serie de pautas para saber cómo controlar los nervios en un examen. Así, nos concentramos en los que realmente importa.
¿Cómo controlar los nervios en un examen?
Tener nervios antes de un examen es normal, algo muy cierto si se trata de una oposición. Al fin y al cabo, superarla o no afectará de lleno a nuestra carrera laboral y futuro. Por tanto, merece la pena aprender a calmarse, lo que contribuirá a mejorar el rendimiento.
Preparar bien el examen
Una de las razones que impide controlar los nervios antes de un examen es la preparación de una prueba OPE. Cuando esta es sólida, el temor a no aprobar es diminuto. Dominamos el temario, hemos efectuado decenas de simulacros y pruebas test y repasado con suficiente antelación. Ante esto, la prueba deja de ser algo aterrador, aunque pueda generar una cierta inquietud.
La solución más eficaz para quitar los nervios antes de un examen es estudiar a fondo. Esto permite mantener la conciencia tranquila y centrada. No se ha dejado nada en el tintero, sino que se ha cumplido el plan. Por tanto, el temor a suspender se reduce, pero no es recomendable bajar la guardia o pensar que todo está superado.
Evitar la cafeína
La cafeína es un excitante que estimula el sistema nervioso central. Esto hace que nos sintamos más despiertos y con mayor energía. No obstante, si se consume demasiada, es posible sentirse inquieto, ansioso o padecer temblores. Ante tal situación, sus beneficios se disiparán rápidamente, por mucho que nos ayude a mantener la concentración.
Para evitar problemas, es recomendable no abusar de la cafeína el día antes del examen. De este modo, dormiremos bien y no nos levantaremos cansados, lo que tendrá un impacto negativo en el rendimiento. Asimismo, si nos sentimos nerviosos, es mejor evitarla antes de realizar la prueba. Solo contribuirá a empeorar la situación.
Pensamientos positivos
Cuando nos preguntamos qué hacer para calmar los nervios antes de un examen, pocas veces reparamos en los pensamientos. Sin quererlo, provocarnos un estado de inquietud a base de pensar en todas las posibilidades de que la prueba salga mal. Nos estamos predisponiendo al fracaso y que nos hará sentir apesadumbrados.
Si bien los pensamientos positivos no nos llevarán a un aprobado, sí que nos ahorrarán nervios. Aunque tampoco se trata de que seamos poco realistas. Simplemente, debemos evitar caer en el derrotismo y el pesimismo.
Aceptar que podemos fallar
El perfeccionismo o unas altas exigencias pueden hacernos sentir nerviosos antes del examen. También es posible que queramos sacar la mejor nota y no dejemos de pensar en ello. Es preciso que aceptemos que podemos fallar o no conseguir los objetivos marcados. Pese a lo que pueda parecer, equivocarse no es algo negativo, ya que es una fuente de enseñanza de primer orden.
Al fallar, estamos en posición de evaluar la situación y solventar los problemas que encontremos. Quizás no nos organizamos bien para estudiar una OPE o fuimos un poco descuidados. En cualquier caso, es importante aprender a tolerar el error. Hacerlo nos permitirá ir mejorando poco a poco, lo que nos llevará a resultados superiores. Eso sí, pensar así no es una excusa para no estudiar y estar tranquilos antes del examen. Es la mejor respuesta a cómo controlar los nervios en un examen.
Leer el examen
Cuando estemos frente al examen, tenemos que leerlo con detenimiento. Es importante prestar atención a las diferentes preguntas y marcar las que mejor llevemos. Así, empezamos a concentrarnos y vamos disipando los nervios. Encontramos tranquilidad en que existen cuestiones que hemos preparado bien, las cuales solucionaremos primero.
De este modo, encaramos las partes más difíciles del examen en calma y con la debida concentración. Asimismo, dispondremos de un tiempo mayor para dar una buena respuesta y hacer memoria.
Ejercicios de respiración
Ante la pregunta de cómo tranquilizar los nervios rápido antes de un examen, la clave está en la respiración. Es una manera efectiva de reducir el estrés y la ansiedad. La técnica consiste en inhalar por la nariz y expulsarlo por la boca poco a poco. Se recomienda efectuar esto varias veces, o las que sean necesarias, hasta recuperar la calma.
En caso de que los nervios sigan presentes, se puede utilizar una bolsa. Esto se debe a que se reintroduce una parte del dióxido de carbono expulsado. Así, el cuerpo comienza a relajarse para respirar más despacio. De esta forma solucionamos el cómo controlar los nervios mediante técnicas de relajación antes de un examen OPE.
En definitiva, estos algunos consejos para cómo controlar los nervios en un examen. Conviene mantener la calma para evitar cometer errores de bulto completando la prueba. Si nos preparamos a fondo, estaremos en una mejor condición y reduciremos el estrés. Y tú, ¿estás pensando en preparar tu examen OPE o examen EIR? Apóyate en IFSES para conseguir tus objetivos.



